La vida universitaria es un viaje que generalmente no se realiza solo, ya que existen diferentes personas con las cuales debemos interactuar: padres, profesores, compañeros de estudios, etc.
Compartir una vivienda universitaria con otros estudiantes, puede ser una experiencia emocionante y enriquecedora, pero también puede representar ciertos desafíos. A continuación mencionamos algunos consejos para una convivencia universitaria armoniosa, sobre todo al compartir habitaciones en una residencia universitaria:
Establecer reglas claras
Si bien cada vivienda universitaria tiene sus propias normas, esto no impide que los estudiantes (que comparten una habitación) tengan sus propias normas. Desde el momento de instalación en la vivienda universitaria, es conveniente establecer reglas básicas para la convivencia, como horarios de limpieza y luces, uso de espacios comunes, políticas de invitados, entre otros. Esto ayudará a evitar malentendidos y conflictos entre los compañeros de vivienda.
Comunicación abierta y respetuosa
La comunicación efectiva es clave para una sana convivencia. Si tenemos diferencias, inquietudes o conflictos, lo mejor es hablar claramente con los compañeros de manera respetuosa y abierta. Es bueno escuchar sus puntos de vista y tratar de encontrar soluciones mutuamente beneficiosas. Indiferentemente cuál sea la situación siempre debemos tratar de ser respetuosos, ya que el respeto es la clave en una convivencia positiva y constructiva.
Respetar el espacio personal
Es importante respetar el espacio personal de los compañeros de cuarto. Por ejemplo, se aconseja evitar tomar o usar las pertenencias de los compañeros sin permiso, además de respetar su privacidad. Otro punto que se debe tomar en cuenta, es que, con la llegada de la tecnología, existen acciones (que afectan a ciertos equipos o accesorios) que pueden ser consideradas como una “violación de la privacidad personal”, un ejemplo de esto, es revisar el teléfono celular o la computadora (laptop) de nuestro compañero de habitación.
Si bien pueden existir reglas claras y seguridad en la vivienda universitaria, es importante que las pertenencias de valor o cosas muy privadas sean guardadas en espacios adecuados. Un ejemplo de esto son los espacios de almacenamiento seguro que tienen varias viviendas universitarias rusas, lo cual permite que los estudiantes tengan sus pertenencias valiosas resguardadas.
Colaborar en las tareas domésticas
Es muy importante establecer un sistema equitativo para compartir las tareas domésticas, como la limpieza, la compra de alimentos o la organización de espacios comunes. También es importante que cada compañero cumpla con sus responsabilidades y no asumir que otras personas se harán cargo de nuestras tareas o responsabilidades. Un ejemplo de esto, es cuando un estudiante asume que su compañero debe limpiar la mayoría de la habitación o cuando no limpia correctamente la parte de la habitación que le corresponde.
Ser considerado con el ruido, luces y horarios
Debemos respetar el horario de sueño y estudio de nuestros compañeros de habitación. Se recomienda evitar hacer ruido excesivo, especialmente durante la noche, lo ideal es buscar la manera de que todos puedan tener un ambiente propicio para descansar y concentrarse. Por ejemplo, si alguien va a escuchar música o ver su programa favorito, lo ideal sería utilizar audífonos, sobre todo si dicha actividad se realiza de noche o si el compañero está durmiendo o estudiando.
Respecto a la iluminación, debemos tomar en cuenta que esta puede interferir de forma directa en el sueño, por lo cual, si es de noche y nuestro compañero está durmiendo, pero necesitamos iluminación, entonces podemos utilizar una linterna o lámpara de mano, para evitar prender la luz general de la habitación.
Resolver los conflictos de manera constructiva
En caso de surgir conflictos, debemos tratar de resolverlos de manera constructiva y amena. En este caso se recomienda buscar compromisos y soluciones que satisfagan a todos los involucrados. Si el problema es muy grave o no podemos llegar a un acuerdo, entonces podemos buscar la mediación de un tercero “neutral”, como un estudiante que tenga mayor edad y experiencia, un asesor de vivienda o el administrador de la residencia.
Ser respetuosos con las diferencias
En una vivienda universitaria, es probable que estemos con personas de diferentes culturas, religiones y puntos de vista. Debido a esto, es muy importante respetar y valorar esas diferencias, además de fomentar la tolerancia y comprensión mutua, sobre todo, si tenemos en cuenta que nos encontramos fuera de nuestro país natal.
Mantener una actitud abierta y flexible
La convivencia universitaria implica adaptarse a diferentes estilos de vida y formas de ser. Mantener una actitud abierta, flexible y con disposición a aprender, es primordial, sobre todo si queremos que la convivencia sea sana, constructiva y enriquecedora.
Hay que recordar que la convivencia requiere compromiso, paciencia y empatía, por lo cual se recomienda mantener una actitud abierta y dispuesta a adaptarse a las necesidades y preferencias de nuestros compañeros de cuarto.
Participar en actividades conjuntas
Organizar actividades y salidas conjuntas con nuestros compañeros de vivienda universitaria, es una buena manera de mejorar la convivencia y hacer nuevos amigos. Esto ayuda a fortalecer los lazos de amistad y crear un ambiente positivo y acogedor en la vivienda universitaria. En muchos casos, la mejor manera de “romper el hielo” o hablar de temas importantes (relacionados a la convivencia), es mediante una actividad, por ejemplo, en muchos casos, la actividad social creará un ambiente ideal para que las personas puedan comunicarse mejor y tratar asuntos importantes.
Otro consejo, es que si tenemos una reunión, fiesta o evento social, siempre invitemos a nuestro compañero de habitación, ya que esto será visto como un punto positivo para la persona invitada, ya que, así no pueda asistir a la reunión, la persona se sentirá valorada y tomada en cuenta.
Alojamiento universitario y ALAR
Cuando se estudia en el extranjero, una de las actividades más importantes es encontrar un alojamiento adecuado, ya que, en el caso de no lograrse este objetivo, puede originar varios problemas para los estudiantes latinoamericanos que desean estudiar en Rusia. Sin embargo, una de las principales ventajas de estudiar en Rusia con ALAR, es que se le garantiza al estudiante latinoamericano un alojamiento universitario, lo cual permite que el estudiante pueda tener un entorno seguro y pueda adaptarse o desenvolverse “satisfactoriamente” en el entorno universitario ruso.
Entender las “etapas” de la convivencia
Muchos estudiantes que conviven con otros, piensan que el comportamiento de sus compañeros será constante, sin embargo, la convivencia tiene diferentes “etapas”, por ejemplo, es normal que al inicio todos den lo mejor de sí, incluso llegando a “forzar” algunos comportamientos para caer bien, sin embargo, cuando la convivencia tiene cierto tiempo (aproximadamente a 6 meses), las personas tienden a ser como son en realidad, sin forzar ningún tipo de comportamiento, lo cual puede afectar a algunas personas. Debido a esto, es importante ser lo más sinceros posibles con nuestros compañeros al inicio de la convivencia, ya que esto evitará “sorpresas” cuando dicha convivencia llegue a los 6 meses o 1 año.
¿Qué opinas sobre este tema? ¿Tienes algún otro consejo para garantizar una buena convivencia al compartir vivienda universitaria?
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Imagen de Tim Gouw vía unsplash.com bajo licencia creative commons.